Villano III. La transformación

El sobrenombre de Villano III viene sujeto y apoyado de varios apodos que a base de esfuerzo formaron la leyenda del tercero de la Dinastía Imperial. Con el nombre que fuera la historia iba a ser la misma, debido a la entrega que cada noche ponía este mítico gladiador.

 

Su padre, al igual que lo hizo con sus hermanos mayores, les pedía siempre que estudiaran y él nunca quiso que se dedicaran a esto, pues siempre se esta expuesto a distanciamientos familiares, lesiones e incompresiones, ya que la lucha libre es muy noble pero también muy ingrata; siguió sus consejos y estudió la carrera de Profesor de Educación Física en la ENEF (Escuela Nacional de Educación Física).

Ray Rosas.

Debutó a los 14 años en una arena de Ciudad Neza, acompañaba al Doctor Muerte y sucedió lo que no se imaginaba, faltó el rival del experimentado Abud Kasim y echaron mano de él, el calzón se lo prestó el mismo Doctor Muerte y las zapatillas Babe Richard, que luchaba como El Aparecido, a quien le dejo las manos hinchadas, pero de tanto ‘madrazo’ que le arrimó; ese mismo día lo bautizaron como Ray Rosas y luchó dándole la cara al público, sin capucha.

La Mancha Roja.

Dentro de él traía el gusanito de la lucha y un día le robó a su papá una máscara roja que le habían regalado en Acapulco, pidió prestado un calzón que también era de él y se fue a luchar a la Arena Caracol, donde se puso el nombre de la Mancha Roja e hizo pareja con La Piraña, que después sería Estrella del Sur. Tuvo que coser un poco los lados del calzón para hacerlo más chico y al llegar a la casa los descosió para que no se diera cuenta su papá. Medio año duró con ese nombre de batalla.

Rokambole.

Le dio vida al personaje de Rokambole, aunque con un equipo y una tapa muy diferente a la que después usaría su hermano, pues al promotor de la Arena Caracol no le gustaba el nombre de Mancha Roja. Con este personaje duró un año y alternó con elementos de aquella época como Los Manchados, Gaby Rosales, Apolo Chino y otros más.

De Búfalo Salvaje a Villano III.

Después decidió usar el mote de Búfalo Salvaje y en la Arena López Mateos de Tlalnepantla fue gracias a la promotora de Pablo Bravo que comenzó a sonar fuerte este nombre, sus hermanos ya luchaban como Las Bestias y luego adoptaron el mote de Los Búfalos Salvajes, durando con el nombre 2 años.

Las luchas en las que participo con estos personajes le dieron mucho fogueo y experiencia. Realmente no participó en ningún combate de apuestas, pero su primer gran triunfo fue como Búfalo Salvaje enfrentando a su tío Chico Mendoza, ese día se dieron una gopiza tremenda en la López Mateos, que estaba a reventar, y fue genial porque el público ignoraba que eran familiares. Al final del combate lo rapó y ese fue su primer logro como luchador profesional.

Nunca pensó en tomar el nombre de sus hermanos y mucho menos ser Villano III, pero el destino le tenía algo preparado, aunque como Búfalo Salvaje, Rokambole o cualquier otro nombre pudo haber hecho algo bueno, desarrollando su trabajo tal y como lo ha hecho como Villano III, fue decisión de sus hermanos Villano I y Villano II darle ese gran nombre.

familia mendoza
Fuente: Por Alma Díaz Valero en Luchas 2000. Especial Edición 37. Villano III. El último rey, p. 7 – 8.

Origen: Villano III. La transformación

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